Tener tos por más de 15 días es un síntoma de tuberculosis y no un simple resfriado, advierten

Especialistas del Ministerio de Salud (Minsa) advirtieron hoy que un cuadro de tos permanente por más de 15 días es un síntoma de tuberculosis y no un simple resfriado, lo que puede llevar a las personas que lo padecen a tomarlo sin cuidado y no acudir a un centro de salud para descartar la enfermedad.

Oswaldo Jave Castillo, coordinador de la Estrategia Sanitaria Nacional de Prevención y Control de TB del Minsa, destacó la importancia de diagnosticar a tiempo dicha enfermedad para acceder al tratamiento gratuito que ofrece el Estado a pacientes con tuberculosis.

El especialista afirmó que esta enfermedad sí tiene cura cuando las personas siguen el tratamiento de manera estricta hasta el final, periodo en el cual deben tener cuidado de protegerse para no transmitir la misma.

“Cuando una persona con tuberculosis tose las bacterias se dispersan en el aire donde pueden permanecer por horas. Cualquier persona que respira el aire que contiene bacterias de tuberculosis puede infectarse”, subrayó Jave Castillo.

Explicó que basta una sola gotita de saliva y estar mal nutridos para que la infección por esta enfermedad haga daño en el organismo. Sin tratamiento, una persona con tuberculosis pone en riesgo no solo su salud y vida, sino también la de sus familiares y amigos.

También precisó que una persona puede tener la infección, pero no tener la enfermedad que por, lo general, afecta más a menudo los pulmones. “Las personas que se han infectado con tuberculosis, pero no han desarrollado la enfermedad activa no pueden trasmitir la enfermedad a otras”, añadió.

Cubrirse al toser

Jave Castillo exhortó a las personas, especialmente si tienen tuberculosis, cubrir su boca y nariz al toser o estornudar, con la finalidad de prevenir la trasmisión  de los gérmenes de esta enfermedad a quienes convivan o realicen actividades cerca de ellos.

Recordó que según la Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que un 5 a 10 por ciento de aproximadamente 2 mil 300 millones de personas infectadas, que representan un tercio de la población mundial, desarrollará finalmente la enfermedad.