Los problemas familiares constituyen la primera causa del consumo de drogas en Lima, según un estudio elaborado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD), con base en la entrevista realizada a 1,000 personas de 15 a 64 años de edad, se informó hoy. Estudio fue presentado en el centro cultural de España.
Titulado Percepciones sociales sobre drogas en Lima (Perú), este informe indica que el 59 por ciento de los entrevistados señaló a los problemas familiares como causa del consumo de droga, seguido de un 46.7 por ciento que lo atribuye a la curiosidad y el deseo de experimentar nuevas sensaciones.
La búsqueda de diversión, la evasión de problemas y el sentirse a disgusto con la «sociedad injusta» fueron otros problemas mencionados por los entrevistados como causas para el inicio en el consumo de estupefacientes.
Entre las conclusiones del estudio destaca que tres de cada cuatro limeños juzga que la principal consecuencia del consumo de drogas es la delincuencia; aunque otras personas, en menor medida, mencionaron la adicción, los problemas familiares o la muerte.
También es importante destacar la altísima proporción (90 %) de limeños que considera muy fácil acceder a las drogas o la cantidad de gente (más de un 80 %) que piensa que en los últimos 10 años empeoró la delincuencia, la violencia en las calles o el desamparo familiar producto del consumo de estupefacientes.
El estudio advierte también que el 90 por ciento de la población consultada cree que ha aumentado la presencia de drogas ilegales y de adictos en las calles, así como los problemas de todo tipo asociados a los consumos de fin de semana.
En general, según los datos de la investigación, los limeños perciben el consumo de drogas como un problema grave, creciente, público, transversal, tolerado socialmente (porque se considera una moda) y rentabilizado por poderes ocultos como el narcotráfico.
De hecho, el “problema de las drogas” es considerado de mucha o bastante importancia en Perú por el 82 por ciento de la población limeña.
Los datos de la investigación fueron presentados por el investigador español Eusebio Megías, director técnico de la FAD y coordinador del estudio, acompañado por los investigadores Fernando Salazar, Inés Bustamante, Elena Rodríguez, Ignacio Megías y Juan Carlos Ballesteros.
Financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el estudio contó también con el apoyo del Centro de Estudios de Problemas Económicos y Sociales de la Juventud (Cepesju) y el Centro de Estudios y Asesoría en Conductas de Riesgo Social y Promoción de Desarrollo Integral (Creser).
Junto con el estudio en Lima se han desarrollado otros dos, con la misma metodología, en las ciudades de Quito (Ecuador) y La Paz (Bolivia), lo cual permite trazar un panorama común y señalar matices diferenciales.