El consumo diario de antioxidantes es determinante para reducir las probabilidades de desarrollar esta enfermedad
El cáncer es una enfermedad muy extendida en la población en estos últimos tiempos. Y aunque hoy existen tratamientos cada vez más avanzados para su cura, el mejor remedio contra este es la prevención.
Incluso con una buena alimentación podemos colaborar con nuestro organismo y correr menos riesgos de desarrollar esta enfermedad. Así lo señaló Jorge Flores del Pozo, director del Hospital Nacional Cayetano Heredia.
“Se ha descubierto que la gente con cáncer necesita antioxidantes y algunos alimentos los contienen y protegen contra los radicales libres. Su alimentación es el factor más determinante para reducir las probabilidades de desarrollarlo”, comentó en América TV.
El especialista recomendó el consumo diario de tomates, sandías, papayas, pescados, nueces, ajos y cebollas. “El consumo de estos productos de forma balanceada cinco veces al día y beber diariamente dos litros de agua, así como el control regular del peso, además de la práctica de cualquier actividad física contribuyen a disminuir los riesgos de cáncer”, aseguró.
Dijo que estos antioxidantes, que se encuentran en frutas y verduras que contienen vitaminas A, C y E, cobre y zinc, ayudan a eliminar las células cancerígenas del cuerpo.
Así, por ejemplo, las frutas, cítricos, verduras, vegetales verdes, nueces, salvado y germen de trigo, lácteos, huevo, hígado y pescados azules o grasos, reducen el riesgo de cáncer de boca, bronquios, colon, esófago, estómago, mama, ovario, piel, próstata y pulmón.
Añadió que el vino tinto reduce el riesgo de cáncer de piel, mama y tiroides. “Es muy saludable pero en cantidades moderadas (de una a dos copas por día), pues el exceso en el consumo de alcohol en general aumenta el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer”, dijo.
Finalmente, advirtió que el consumo frecuente de carnes rojas, tabaco, alcohol, embutidos y frituras incrementan el riesgo de presentar neoplasias, lo mismo que el reutilizar el aceite y el abuso de la sal en la preparación de los alimentos.