La ministra de Educación, Patricia Salas, dejó pasar ayer una nueva oportunidad para detallar las escalas remunerativas y el monto de los aumentos salariales contenidos en el llamado proyecto de ley desarrollo docente. “Ese dato lo vamos a presentar cuando se promulgue la ley”, dijo la ministra.
El Consejo de Ministros aprobó el viernes en la noche este proyecto (también denominado ley de reforma magisterial). Luego de la aprobación, la ministra Salas se negó, en conferencia de prensa, a revelar los montos de la escala remunerativa propuesta.
Y ayer tampoco quiso hablar de cuánto representará esta ley para el Estado Peruano. Solo aseguró que sí existían las reservas financieras para ello. “El formato saldrá del debate final en el Congreso”, acotó.
Asimismo, admitió que el Sindicato Unitario de Trabajadores de la Educación del Perú (Sutep) participará en el proceso de evaluación del magisterio, a pesar de que el ministro de Trabajo, José Villena, negó tal posibilidad. “(El Sutep) está en uno de los tres momentos de evaluación”, dijo la ministra Salas.
Según un borrador del proyecto de ley que circuló entre algunos medios de comunicación, son tres los momentos de evaluación: ingreso a la carrera, ascenso y evaluación de desempeño. La ministra no indicó en cuál de ellos participará el Sutep.
El borrador indica que en cada región habrá un comité de vigilancia formado por el gobierno regional, el gobierno local, la Defensoría del Pueblo y la organización gremial del magisterio. “(El Sutep) es uno de los actores en un conjunto, y no es el que evalúa directamente, sino que lo hace en un comité de evaluación”, admitió la ministra.
LAS RAZONES DEL CAMBIO
Salas dijo que no bastaba con modificar la Ley de Carrera Pública Magisterial (LCPM), pues era necesario ampliar sus alcances. “Lamentablemente, a la fecha solo había incorporado un pequeño número de maestros (25 mil) y necesitábamos trabajar con las mismas reglas con el conjunto de ellos”, dijo. Comentó que se hubiera requerido 15 años para que todos los maestros migraran a este régimen.
Además, dijo que la LCPM generaba un gran desorden en la gestión magisterial y salarial, pues había profesores que, teniendo la misma responsabilidad y la misma antigüedad y trabajos iguales, recibían sueldos distintos.
“Es inaceptable que un país tenga dos regímenes: uno para buenos maestros (en alusión a la LPCM), y otro para malos (la antigua Ley del Profesorado). Es un error de gestión”, dijo Salas.
¿EVALUACIÓN OBLIGATORIA?
La ministra Salas también dijo que la LCPM contemplaba “una evaluación compulsiva”. En cabio, prosiguió, con la ley de desarrollo docente, los profesores podrán elegir el día en el cual rendirán sus evaluaciones.
Y aunque dijo, en un primer momento, que la evaluación era voluntaria, luego tuvo que corregirse. “Es obligatoria en la medida que se juegan su ascenso y no pueden pasarse la vida sin evaluarse. Hay un tope [de años] en el cual la evaluación es obligatoria”, dijo Salas.
Lo que sí adelantó la ministra es que los profesores que enseñen en escuelas unidocentes multigrado recibirán una gratificación de 20%; los que enseñen en zonas rurales o en el Vraem, una de 10%, y quienes lo hagan en zona de frontera, una de 5%.
PRECISIONES ADICIONALES
Horas después de la entrevista, la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) emitió un comunicado en el cual se aclara que la ley de desarrollo docente busca unificar los dos regímenes existentes, los cuales “dividen y enfrentan a los maestros”.
En el comunicado también se precisa que la nueva ley aumentaría de cinco a ocho los niveles de carrera, lo cual permitiría a los maestros mayores oportunidades de ascenso e incremento salarial.
La PCM adelantó que se pretende ampliar las áreas de desarrollo profesional para que los profesores, además de ejercer la docencia y tener cargos directivos, puedan desempeñarse en las áreas de capacitación, innovación e investigación. También podrán postular a cargos administrativos de mayor responsabilidad en las UGEL.
