El Ministerio de Educación, a lo largo de la Educación Básica Regular, especialmente en el nivel de Educación Secundaria, viene fortaleciendo de manera integral la formación ética y cívica de los estudiantes, basada en valores y en el desarrollo de conocimientos, capacidades y actitudes para el ejercicio responsable de su ciudadanía y el incremento de su autonomía moral, señaló la directora de Educación Secundaria, Antonieta Cubas Mejía.
Es bajo esta óptica que el MINEDU promueve una educación integral, para que los estudiantes adquieran un conjunto de aprendizajes relacionados con la formación ética, los valores patrióticos y la consolidación de la identidad social, cultural y nacional; los cuales se trabajan de manera especial en la Educación Secundaria, al interior de las áreas de Formación Ciudadana y Cívica; Persona, Familia y Relaciones Humanas, e Historia, Geografía y Economía, así como a través del tratamiento de los temas transversales como “Educación para la convivencia, la paz y la ciudadanía” y “Educación en valores o formación ética”, manifestó Cubas.
De esta manera, se reemplaza la antigua tesis de que el estudiante de Secundaria deba tener una formación premilitar en la escuela para inculcarle, en forma coercitiva e impositiva, el respeto a los símbolos nacionales y el amor a la patria.
En la actualidad –señaló la referida directora– los estudiantes realizan acciones que orientan la conciencia y actuación ciudadana, mediante la ejecución de proyectos participativos en el área de Formación Cívica y Ciudadana, lo que fortalece el desarrollo de la ciudadanía activa y la construcción de la democracia como estilo de vida, favoreciendo una convivencia social, justa y armónica. Una formación democrática promueve el respeto irrestricto a las normas y al orden legal vigente, así como el ejercicio pleno de la ciudadanía y el fortalecimiento del Estado de derecho.
Asimismo, precisó que durante los cinco grados de Educación Secundaria los estudiantes reconocen las formas, principios y mecanismos de participación ciudadana y reflexionan sobre la importancia de vivir en un sistema democrático, respetando valores como la libertad, la justicia, la tolerancia y el bien común, así como la defensa del Estado de derecho y los Derechos Humanos.
Finalmente, sostuvo que los estudiantes fortalecen sus competencias ciudadanas, mediante el desarrollo de un conjunto de capacidades para explicar la relación entre la democracia, el respeto a las normas y el papel de la Constitución en la organización del Estado, enjuiciando la importancia de la ética en la vida social, la política y la participación ciudadana en el logro del bien común.
