Falta menos de cuatro meses para que el año escolar 2011 concluya, sin embargo recién esta semana la unidad de logística del Ministerio de Educación (Minedu) envió a nuestra ciudad parte del material que deben utilizar los 3 mil alumnos del nivel inicial en la región La Libertad, dentro de su proceso de formación.
El equipamiento consiste en libros, cuadernos prácticos y material de estimulación temprana. Se conoció que el motivo que ocasionó el retrasó en el envío del material fue el Decreto Supremo 012-2011, que impidió ejecutar la inversión necesaria para el traslado de los enceres, que se encontraba listo desde hace más de tres meses.
Esta semana recién los entregaran
Según indicaron funcionarios del Minedu, el último martes llegó el material correspondiente a la Unidad de Gestión Educativa Local (Ugel) de Trujillo, y hoy sábado debe arribar lo correspondiente a los planteles iniciales de la sierra y costa de nuestra región.
“Se trata de material de comunicación, matemática y biblioteca de aula para todos los centros de educación inicial. Una parte es para la docente a quien se le entrega un cuaderno de trabajo, una guía de inclusión, guía del buen trato y guía de habilidades de comunicación, y otra parte es para los niños”, indicó Mariela Gálvez Castillo, especialista de la unidad de Educación Inicial del Minedu.
Bien distribuidos
Precisó que estos libros y cuadernos prácticos son destinada para los alumnos de una sola aula, y si en caso uno de los planteles cuenta con dos turnos será usado tanto en horarios de la tarde como de la mañana.
“Invocamos a las docentes de nivel inicial para que hagan su cuadro de distribución lo antes posible, porque este material ha llegado para ser usado este año. No queremos que quede guardado en cajas, sino que sea usado inmediatamente por las maestras… Existe mucha preocupación de que las docentes no lo recojan, porque ellas esperan muchas veces a que les comunique”, manifestó.
Gálvez Castillo acotó que para la asignación de material tuvieron diversos problemas, sobre todo errores en las cantidad asignadas por cada centro inicial. “Nos brindan cantidades que finalmente no coinciden con el número real y cuando llegan los libros no alcanzan para los niños”, indicó la especialista.
Fuente: LA INDUSTRIA
