Doña María tiene sobrepeso. Se mira al espejo, respira aliviada y dice en voz alta: «solo tengo unos kilitos demás, no hay que preocuparse». Pero debería hacerlo, pues su organismo anida un problema de salud serio: la diabetes. Sin que María lo note, poco a poco su cuerpo está dejando de producir insulina, una sustancia muy importante que transporta la glucosa (azúcar) a las células, para que estas la conviertan en energía. Sin la insulina, el organismo no podría aprovechar el azúcar y esta contaminaría la sangre con azúcar, dañando muchos órganos.
El problema de María está en el páncreas. Allí se produce la insulina. Como en las últimas dos décadas, esta mujer de 70 años comió muchos postres y dulces, su páncreas ha tenido que trabajar bastante.
La diabetes inicial de María aún no da síntomas. Esto es lo peor de la enfermedad, que al principio es silenciosa, refiere la doctora Teresa Triviños. Cuando la sangre tiene altos registros de glucosa, los síntomas más comunes son: mucha sed, orinar con frecuencia y pérdida de peso.
DIABETES Y OBESIDAD
Según Triviños, uno de cada dos obesos llega a padecer diabetes. No importa la edad que tengan. A decir de la especialista, esta enfermedad persigue a quienes engordan, no realizan actividad física y se alimentan de forma inadecuada. Mientras estas personas siguen comiendo, la capacidad de la insulina para colocar la glucosa dentro de la sangre va disminuyendo, hasta que ya no funciona más.
Lo preocupante es que mundialmente la tendencia a engordar es clara. Una de cada diez personas tiene obesidad. Y en Sudamérica, cuatro de cada diez personas mayores de 29 años tienen sobrepeso.
En Arequipa se estima que el 54% de la población tiene sobrepeso u obesidad, en Tacna la cifra se eleva a 61% y en Moquegua a 62%.
Teresa Triviños remarca que también hay una diabetes gestacional, se presenta en mujeres embarazadas con obesidad, colesterol o triglicéridos altos, y antecedentes de familiares en primer grado con la enfermedad. La diabetes también se presenta en niños, sobre todo en aquellos que nacieron con más de cuatro kilos de peso.
TRATAR A TIEMPO
Es necesario atacar esta enfermedad precozmente, porque puede dañar varios órganos. Por ejemplo el riñón, que sufre las consecuencias del aumento de azúcar en la sangre y deja de eliminar toxinas, produciendo insuficiencia renal. También puede provocar impotencia sexual, daños al cerebro (derrame cerebral), al corazón (infarto) y a los pies (amputaciones). Asimismo, Triviños refiere que algunos nervios son dañados causando dolor y sensación de frío en las piernas. La diabetes puede producir problemas en la visión como cataratas e incluso la ceguera.
Esta enfermedad es la causante de la mayor carga de discapacidad por enfermedades en el Perú (83%), por las amputaciones y afecciones a la vista. También se le atribuye el 17% de las muertes prematuras.
Fuente: La República.pe