En el lugar se halló basura acumulada, moscas, telarañas. En el cuarto del portero se preparaban los alimentos, en San Miguel.
En un operativo de la Fiscalía junto a personal de sanidad de la Municipalidad de San Miguel se logró detectar que el kiosko del colegio Jesús Redentor vendía productos antihigiénicos.
El cuarto del portero era el lugar donde se almacenaban y guardaban los alimentos, allí se encontró una olla de tallarines que eran vendidos a estudiantes y profesores. En el lugar se halló basura acumulada, moscas, telarañas y productos en mal estado.
Por su parte, los dueños del puesto de ventas quisieron deslindarse del hecho señalando que ellos no preparaban los alimentos, hasta uno de ellos dijo no comer allí.