El desayuno, la primera comida del día es la principal para todo ser humano, porque rompe el estado de ayuno de aproximadamente 12 horas. Con el desayuno entregamos al cuerpo los primeros nutrientes que servirán para cumplir sus funciones energéticas, cerebrales y metabólicas.
El desayuno debe ser variado a lo largo de la semana y debe adecuarse a las condiciones de salud y estilos de vida de cada persona. En esta oportunidad les presento tres ejemplos de desayuno adecuados pensados en tres condiciones de salud frecuentes en nuestra población: diabetes, colesterol y sobrepeso.
Desayuno para el diabético
1 tajada de pan integral, ¼ de palta, 200ml de yogurt, 1 taza de yacón. La harina del pan integral llegará lentamente a la sangre gracias a la fibra que contiene, también a la palta que por ser grasa retarda la llegada del azúcar a la sangre y al yacón que teniendo un sabor dulce no aporta azúcar al desayuno. El yogurt aporta principalmente, proteínas, calcio, vitamina D.
Desayuno libre de colesterol
1 vaso de avena, yogurt de soya 2 cucharadas de granola, 1 taza de ensalada de frutas. La avena tiene fibra soluble que arrastra colesterol de la bilis eliminándolo a través de las heces. Tanto la fruta, como la avena, yogurt de soya y granola son alimentos de origen vegetal y ninguno contiene colesterol.
Desayuno bajo en calorías
1 taza de sandía o papaya, 1 pan pita integral 60 gramos de queso fresco bajo en grasa, 2 rodajas de tomate, 1 cucharada de germinados vegetales, 1 taza de café americano. Aquí se busca reducir las calorías pero al mismo tiempo tener suficientes nutrientes, por eso el tomate rico en vitamina C y A así como los germinados concentrados en minerales, vitaminas y fibra son muy bajos en calorías pero nutritivos. La fruta elegida aporta mucha agua, sabor dulce, pocas calorías. El queso bajo en grasa por su parte aporta proteínas y calcio.
Como verán podemos armar tiempos de comida con la cualidad nutricional que cada persona necesita. Recuerden que a lo largo del día se debe elegir alimentos pensando en nuestras necesidades personales y en cantidades suficientes sin tener excesos