Un camino inca de más de cuatro kilómetros, paralelo al tradicional que conduce a Machu Picchu, fue descubierto por un grupo de especialistas y técnicos de la Dirección Regional de Cultura (DRC) de Cusco, que realizaba trabajos de conservación, anunciaron hoy especialistas.
Oscar Montufar La Torre, arqueólogo residente del Camino Inca a Machu Picchu, señaló a la Agencia Andina que se trata de una vía empedrada de 1.70 metros de ancho, que se bifurca en el sector Chaquiccocha (kilómetro 24 del tradicional Camino Inca a Machu Picchu) y llega al conjunto arqueológico de K’antupata.
Se vuelve a unir al camino tradicional a la altura del kilómetro 33, entre los conjuntos arqueológicos de Inti Punku y Wiñayhuayna (de este último al santuario de Machu Picchu hay 3.7 kilómetros de distancia).
A lo largo de la ruta hay muros de contención de hasta diez metros de altura, muros de retención, un túnel de diez metros con 28 escalinatas, estribos de un puente de cinco metros, drenajes, canales, escalinatas y miradores, detalló.
Destacó que el tramo descubierto, de cuatro kilómetros y 31 metros lineales, a más de 3,600 metros sobre el nivel del mar, mantiene intactas sus características originales en un 70 por ciento, aunque cubierto de musgo y varias especies de orquídeas y helechos.
El 30 por ciento restante fue dañado por deslizamientos de tierra y la espesa vegetación de la zona, indicó.
Para Montufar La Torre, el hallazgo evidencia la existencia de una gran red vial, que tuvo fines reales, administrativos y militares, “es por eso que se evidencian varios caminos en un mismo lugar”, acotó al precisar que este tramo está dentro del parque arqueológico de Machu Picchu.
“El hallazgo es muy importante porque se da después de 500 años; esto reafirma que las construcciones arquitectónicas de los incas fueron firmes y se mantuvieron. Es importante también para fortalecer el proyecto Qhapaq Ñan”, resaltó.
K’antupata es un complejo arqueológico descubierto en la década de los ochenta del siglo pasado, que registra pinturas rupestres, sectores urbanos y agrícolas, fuentes de agua, plazas hundidas, una plaza triangular y escalinatas.
El director del parque arqueológico de Machu Picchu, Fernando Astete Victoria, adelantó que solicitarán autorización al Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) para retirar la vegetación que cubre el referido camino y trasladar las especies endémicas. Este trabajo demoraría un año.
Luego de ello, dijo, se formulará un proyecto de investigación y, posteriormente, se procederá a la puesta en valor, que tardaría un año y medio.
“Es muy importante para el parque arqueológico poner en valor y mostrar este nuevo camino a la comunidad científica, con ello estamos demostrando que los incas fueron grandes constructores de redes viales”, finalizó Astete Victoria.
Fuente: ANDINA