El Sunedu, dijo, será un organismo autónomo que le permitirá al Ministerio de Educación cumplir con el encargo constitucional de supervisar la calidad de la educación, en este caso, la superior universitaria.
Indicó que si dichas universidades no cumplieran con adecuarse a la norma, se establecerá gradualmente una multa, luego una suspensión y, de ser el caso, la cancelación de la licencia provisional de funcionamiento.
«Hay universidades que vienen funcionando y que no tienen buena infraestructura o docentes a tiempo completo. No significa que, de la noche a la mañana, se cerrarán sino que tendrán que pasar por una fiscalización», agregó Trelles.
Trelles también explicó que, para otorgar la licencia de funcionamiento, la Sunedu tendrá que verificar el cumplimiento de las condiciones básicas de calidad que ofrece el servicio educativo superior universitario; de ser así, se dará luz verde.
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Todas serán fiscalizadas
Por su parte, el jefe de la Oficina de Asesoría Jurídica del Ministerio de Educación, Richard García Sabroso, dijo que “la Superintendencia no solamente supervisará, fiscalizará y sancionará a aquellas universidades que autorice, sino a todas las que vengan operando incluso con anterioridad a la emisión de la Nueva Ley Universitaria”.
Tanto Trelles como García explicaron a la prensa en qué consiste la nueva Ley Universitaria, aprobada por el Congreso de la República tras un debate de dos años en la Comisión de Educación y 15 años en el Parlamento.
Fuente Andina