Escolares en emergencia
–¡Soplón, tombo soplón! Aquella mañana, al capitán PNP Carlo Costa lo recibieron así: a gritos. Las voces eran inmaduras, traviesas, delicadas. Los insultos llegaban sin motivo y el oficial, esta vez, no se defendía. Un grupo de adolescentes interrumpía sus clases de Educación Física solo para incomodar a aquel extraño uniformado que había ingresado al…