Los congresistas del periodo anterior, incluidos los ahora reelectos, planeaban cobrar una compensación extraordinaria de desinstalación ascendente a dos remuneraciones. Es decir, S/. 31, 200.
De acuerdo a una decisión firmada en la sesión del pasado 20 de julio, en la Mesa Directiva del gobierno anterior, presidida por el aprista César Zumaeta Flores.
El acuerdo establecía que a partir del periodo parlamentario en ejercicio, el pago de una comisión extraordinaria por “función congresal ininterrumpida”, el cual fue fijado sobre la base de la remuneración mensual y establecía abonarlo al término de cada gestión.
Sin embargo, “esta medida fue dejada sin efecto en una sesión del nuevo Parlamento el pasado 24 de agosto. Intentamos limpiar la imagen de los congresistas para que no nos llamen otorongos y esto es una muestra de ello”, indicó Yehude Simon en entrevista con diario La República.
Para el actual vicepresidente de la Mesa Directiva, esta fue una jugada para cobrar una especie de “desinstalación”, aunque le cambiaron de nombre a la figura puesto que legalmente no correspondía.