Axel Rivas: “En el Perú hay desigualdad y docentes con bajos salarios”

Investigador principal del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC). Doctor en Ciencias Sociales.

El Perú mejoró en la calidad de los aprendizajes a costa de aumentar la desigualdad. El libro América Latina después de PISA, de Axel Rivas, expone la situación de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Uruguay y Perú. Este año, el país rindió la prueba PISA 2015. Quedan pendientes los resultados. También hay desafíos.

Los resultados de la prueba PISA (2012) dejaron al Perú en el último puesto, pero usted menciona que existen mejoras desde que el país comenzó su participación (2001). ¿En realidad estamos últimos?

No. El ránking de la prueba PISA es muy fallido y no debe usarse como tal, porque participan pocos países y la mayoría son desarrollados. También hay algunos pobres, de los cuales Perú es quizá el más pobre. Por suerte tenemos pruebas más representativas para América Latina como la TERCE (2013). Allí, Perú ha tenido un gran crecimiento. Está al mismo nivel de aprendizaje en lectura y matemática que Argentina, Brasil y Colombia. Está en el promedio de la región.

Pero, ¿qué sucede en la zona rural? No hay avances. Por ejemplo, en la Evaluación Censal de Estudiantes (ECE) hay mejoras, pero no para todos.

En PISA no se pueden ver los resultados por zona rural, pero sí por cuartiles de nivel socioeconómico. Allí hay un punto muy crítico: el Perú ha aumentado en desigualdad educativa, ha sido uno de los pocos países de América Latina que, en lugar de reducir, aumentaron la brecha de aprendizaje entre los niveles más bajos y altos del 2000 al 2012.

¿Cuál es el principal problema en la escuela pública peruana?

Los problemas sistémicos tienen que ver con el rol del docente, cómo fortalecer su profesión, atraer a los mejores, tener una carrera profesional, con un buen pago… Me parece que el Perú está encarando ese desafío porque ha tenido dos reformas magisteriales en los últimos 10 años. Veo que hay conciencia política de la importancia crucial que tiene la docencia (…) Otro tema central está vinculado con la inversión educativa. El Perú tiene la inversión más baja que el promedio de América Latina en relación con el PBI (…).

Los docentes peruanos hoy no encuentran esos beneficios.

No encuentran eso, pero por lo menos ha habido políticas que van hacia esa dirección.

¿Son políticas tardías?

Es difícil de decir. Cuando uno compara con otros países de la región, el Perú es uno de los que están liderando los procesos de transformación de la carrera docente (…).

¿Cuál es la situación del salario docente en el Perú, en comparación con el de otros países?

Es bajo, tan bajo como la inversión educativa y como lo es el nivel de la economía. El Perú ha tenido un gran crecimiento económico durante la primera etapa del siglo XXI (…) pero aún sigue siendo pobre, con grandes desigualdades y que paga bajos salarios docentes.

¿Qué tan bajo es el sueldo en comparación con el promedio?

Del salario docente, no tenemos una medida estrictamente comparable (…). Sabemos, por la aproximación de esas cifras, que es un salario más bajo que el de otros países analizados en el estudio, pero no se puede dar una medida estricta.

En relación con otros países latinoamericanos, Perú está atrás.

Si se compara con los 6 países del estudio, tiene menor inversión educativa y menor salario docente. Pero eso es frente a países más ricos. Junto a Colombia son los más pobres y los que tienen más baja inversión.

¿Cómo está el Perú frente a los otros países analizados?

En inversión, Perú está muy por debajo del resto de América Latina y en particular de estos 7 países analizados. Entre el 2000 y 2012, el Perú invirtió entre el 2,5% y 3% del PBI en la educación, que es una cifra muy baja. En el resto de países, la cifra pasó de 4% a 4,5% del promedio. Argentina y Brasil están por encima del 6%.

Entre el 2000 y el 2015, ¿qué medidas sí funcionaron en el país y qué otras debieron ser priorizadas, pero no se hizo?

Perú tuvo antes una inversión educativa que permitió generar pisos básicos, escuelas con mejor infraestructura, compra de computadoras, textos y ha tenido otras políticas incipientes o que todavía no vemos expresadas en resultados, como la reforma de la carrera magisterial, la cual se materializará con más tiempo (…) No ha sido un país que destaque por sus políticas educativas: Perú tuvo 21 ministros de educación en los últimos 25 años. Resulta muy difícil garantizar la continuidad con tanto recambio. El Perú no es un caso donde uno pueda establecer una relación causal entre políticas y resultados.

Fuente: La República.pe