En la segunda mitad del 2018, empezará el cierre de las universidades que no cuenten con las condiciones mínimas para brindar el servicio educativo. Así lo tiene previsto la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), encargada de evaluar el cumplimiento de estándares básicos como infraestructura, plana docente, laboratorios, entre otros.
“Hacia el segundo semestre de este año deberíamos estar más avanzados en el proceso de evaluación y tener una mejor idea de qué universidades no cumplen con las condiciones básicas de calidad. Esas tendrán que dejar de funcionar”, manifestó la titular de la Sunedu, Lorena Masías.
Precisamente, este punto era uno de los más demandados el 2014, cuando se aprobó la Ley Universitaria, debido a la existencia de instituciones que funcionan en garajes, centros comerciales e incluso al costado de casinos. Estas son las denominadas “universidades chicha” que ofrecen un bajo nivel académico.
Aún en adecuación
A la fecha, la Sunedu ha otorgado la licencia de funcionamiento a 30 universidades (22 privadas y 8 públicas), con lo que se garantiza el cumplimiento de los estándares mínimos. En el último grupo que ha obtenido la autorización están la Universidad Nacional de Jaén (Cajamarca), la de Moquegua, la Salle y la Católica de Santa María (Arequipa).
El proceso de licenciamiento arrancó en diciembre del 2015. Desde ese momento, las 142 universidades podían presentar su solicitud para pasar la evaluación. La Sunedu, en tanto, dispuso un plazo de dos años para que las instituciones se adecúen a las exigencias.
Si bien el periodo vencía el 31 de diciembre del 2017, la entidad lo amplió hasta el 31 de julio de este año, de acuerdo a la última data oficial. De tal manera que, hasta esa fecha, las universidades que aún no obtienen el licenciamiento podrán acondicionar sus espacios para pasar la evaluación.
Así, a partir de la segunda mitad del año, se conocerá qué universidades aún no logran adecuarse y cuáles no cumplen con las condiciones básicas.
Cierres voluntarios
Lorena Masías, de la Sunedu, detalla que algunas universidades ya han presentado un cierre voluntario de filiales.
Según explica, en pleno proceso de licenciamiento, las instituciones eligen dos opciones si su filial no cumple: la universidad podrá invertir los recursos adicionales para adecuarse a las exigencias de la Sunedu o podrá optar por un plan de cierre voluntario.
Cuando un establecimiento cierra, debe elaborar un plan de reubicación a fin de no perjudicar a los estudiantes.
Balance y futuro
Hasta el momento, la Sunedu ha detectado 6 entidades que funcionaban de manera ilegal, así como 100 carreras y 80 establecimientos no autorizados. En base a ello, ha sancionado a 20 universidades por programas no autorizados y 3 personas jurídicas que ofrecían el servicio sin autorización.
En tanto, y aunque su gestión ya culminó, Lorena Masías continúa dirigiendo la Sunedu, en cumplimiento de la Ley Universitaria. El Ministerio de Educación aún evalúa su permanencia.
Moratoria
La Comisión Permanente del Congreso discutirá le Ley de Moratoria, que impide la creación de más universidades. Su debate está previsto para la quincena de febrero.
En la Universidad Nacional de Trujillo, un grupo de profesores ha solicitado de manera oficial el cese de catedráticos que hayan cumplido con los 75 años como lo ordena la Ley Universitaria.
Fuente:larepublica.pe