El Ministerio de Educación aclaró las definiciones de «sexo» y «género», ya que busca precisar el contenido del documento para evitar «tergiversaciones». También descartó que se incluya alguna «ideología» y aseguró que permanecen los siete enfoques transversales. Ahora se desarrollará el programa curricular por niveles.
Luego de varias semanas de debate público y después de opiniones a favor y en contra, el Ministerio de Educación (Minedu) decidió modificar y ampliar algunos puntos del nuevo Currículo Nacional de Educación Básica Regular, documento que empezará a aplicarse en 12 mil colegios de primaria.
Los cambios, aprobados ayer mediante una resolución ministerial, se difunden entre dos fechas clave: el inicio del año escolar, programado para este lunes 13 de marzo, y la marcha del movimiento ‘Con mis hijos no te metas’, que el sábado pasado convocó a los opositores de la inexistente “ideología de género”.La titular del Minedu, Marilú Martens, en reiteradas ocasiones ha defendido el contenido del currículo y ha negado que incluya dicha «ideología».
Sin embargo, reconoció que las «preocupaciones» de los padres eran válidas y que se generaban por «temor» y desinformación». En esaspecto, el sector explicó que las «precisiones» realizadas buscan «aclarar el contenido» para «evitar tergiversaciones».
Los ajustes incluyen el reemplazo y la eliminación de términos en las páginas 16, 22 y 30 del currículo, en las que se aborda el «Enfoque de igualdad de género» y la competencia de «Construcción de la identidad», respectivamente. Según ha dicho la propia Martens, los críticos del documento descontextualizan frases de esas páginas para sustentar sus posturas.
Los cambios
Al definir el enfoque de igualdad de género, en la versión anterior del currículo se afirmaba: todas las personas, «independientemente de su identidad de género», tienen el mismo potencial para aprender y desarrollarse plenamente». En la nueva versión, la frase entre comillas ha sido eliminada (ver facsímil).
En el mismo apartado se insiste en que lo «femenino» o «masculino» se basa en una diferenciación biológica, pero que estas «nociones», en última instancia, se construyen a diario con las interacciones.
En la nueva versión también se añade que los roles y actitudes asociados a hombres o mujeres son comunicados por la sociedad de forma constante a lo largo de sus vidas, lo que en algunos casos «se traduce en desigualdades».
También ha sido modificada la página 22, en la que se detallan las competencias y capacidades que debe adquirir el alumno para construir su propia identidad. En ese punto, a la capacidad de «vivir la sexualidad de manera plena y responsable» se le ha añadido la frase: «de acuerdo a su etapa de desarrollo y madurez».
En la página 31, en la que se decía que los estudiantes deben aprender a vivir una «sexualidad responsable y placentera». Esta última palabra ha sido reemplazada por «integral». Como se recuerda, estas expresiones eran utilizadas por sectores conservadores para afirmar que el currículo promovía el inicio de la vida sexual a temprana edad y la promiscuidad, lo que fue desmentido reiteradas veces.
Otro de los puntos que se cuestionaba se encontraba en la página 30, en la que se podía leer que, para vivir esa sexualidad, hombres y mujeres tomaban conciencia de sí mismos mediante «la exploración y valoración de su cuerpo». Los críticos del currículo sostenían que la palabra «exploración» incitaba al onanismo o tocamientos, por lo que fue reemplazada por «conocimiento del cuerpo».
El glosario
El Minedu ha sumado siete términos a los ocho que ya tenía el glosario del currículo. Las nuevas definiciones, en orden de aparición, son las siguientes: educación sexual integral, género, identidad, igualdad de género, orientación sexual, sexo y sexualidad.
Se precisa, por ejemplo, que el sexo «es el conjunto de características físicas, biológicas, anatómicas y fisiológicas de los seres humanos, que los definen como hombre o mujer» y que «viene determinado por la naturaleza, desde el nacimiento».
El género, en cambio, se define como los «roles y conductas atribuidas por las diferentes sociedades y culturas a hombres y mujeres, entendidos desde una dimensión sociocultural, y no exclusivamente biológica».
Esta visión del género, afirma el Minedu, permite establecer relaciones sociales más democráticas entre hombres y mujeres, siempre basadas en «la igualdad de oportunidades y el respeto a las diferencias».
La igualdad de género se define como «la valoración igualitaria de los diferentes comportamientos, aspiraciones y necesidades de los hombres y mujeres». En tanto, la orientación sexual, que no es de elección voluntaria, «es la atracción emocional, afectiva y sexual hacia otra persona».
También aparece el concepto de «identidad», que es entendida como el sentido de uno mismo que se «desarrolla desde el nacimiento y se consolida hacia el final de la adolescencia», pero que se construye a lo largo de la vida.
Importante
El Minedu señaló que las precisiones no eliminan ninguno de los siete enfoques transversales que contiene el currículo, entre ellos el de igualdad de género. Se mantienen también los referidos a la interculturalidad, derechos, ambiente, inclusión, bien común, entre otros.
Educar en igualdad es imprescindible, necesario, si queremos una sociedad civilizada. Hay mucha desigualdad entre varones y mujeres. Debemos y tenemos el derecho de tener una Educación inclusiva muy a pesar que haya grupos desinformados que dificultan el problema, apoyo a la Administración en este sentido, pero también entiendo que nuestro país es tradicional en muchos aspectos y que la desinformación está a la orden del día.
La única forma de evitar la desinformación es invitar a la comunidad a opinar abiertamente, y no dejar a los funcionarios de estado que nadie eligió a que decidan por todos los peruanos.