El Consejo de Ministros aprobó hoy un proyecto de ley que prohíbe la aplicación de toda medida correctiva que atente contra la integridad física y psicológica de menores de edad, en el hogar, la escuela y en cualquier otro ámbito del país, informó la ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), Ana Jara.
Este proyecto de ley será remitido al Congreso bajo el amparo del artículo 105 de la Constitución. Para el efecto, se modifican diversos artículos de los códigos de los Niños, Niñas y Adolescentes; y Civil, prohibiendo el castigo físico y psicológico como medida correctiva.
La ministra Ana Jara explicó que el proyecto no pretende anular la posibilidad de los padres y madres de corregir y educar a sus hijos y, por el contrario, estimula la posibilidad de cumplir con esta obligación garantizando la protección de esta población en estado de vulnerabilidad.
“Demostraremos que sí es posible educar con afecto y respeto”, indicó en alacio de Gobierno, tras concluir la reunión del Consejo de Ministros.
Dijo que a través de la propuesta se plantea modificar los artículos 4°, 16° 24°, 38°, 74° y 241° del Código de los Niños y Adolescentes, así como el artículo 423° del Códigio Civil.
En relación al ámbito escolar, precisó que el proyecto establece la prohibición de aplicar medidas correctivas que atenten contra la integridad de los niños y adolescentes.
Sin embargo sostuvo que también se adiciona como un deber de los menores de edad de tratar con respeto a sus docentes y autoridades educativas.
“De esta manera el Perú se suma a otros países de la región como Uruguay, Venezuela y Costa Rica que ya tienen leyes expresamente prohíben todo tipo de castigo físico y humillante como mecanismo de corrección”, indicó.
Advirtió que no existe otra forma de construir una nación desarrollada. “Ningún país desarrollado ha crecido a través de la violencia o permitiéndola”, precisó.
Dijo que de acuerdo con estudios efectuados sobre esta problemática se advierte que los principales agresores de los niños son los padres biológicos, pero también se ha registrado violencia fuera del entorno familiar, como amigos, profesores, vecinos y desconocidos, entre otros.
Fuente: Andina